1 de diciembre de 2013

El Club de Lectura Virtual lee...

Vamos a continuar en esta aventura del Club de Lectura Virtual, con la novela “Los enamoramientos” de Javier Marías, con la que ganó Premio Nacional de Narrativa 2012 y cuya dotación económica, donó a las bibliotecas públicas. "Creo que es mejor que el Ministerio de Cultura destine ese dinero a lo que les parezcan. Ojala lo destinen a las bibliotecas públicas que han recibido cero euros en los presupuestos generales del Estado"; un hecho que Javier Marías calificó como "escandaloso".

Ya en materia, comentar para empezar, que los enamoramientos es un libro sobre la impunidad y sobre la horrible fuerza de los hechos; sobre la inconveniencia de que los muertos pudieran volver, por mucho que se los haya llorado y que en apariencia nada se deseara tanto como su regreso, o al menos que siguieran vivos; también sobre la imposibilidad de saber nunca la verdad cabalmente, ni siquiera la de nuestro pensamiento, oscilante y variable siempre.

Con la lucidez que le caracteriza, Marías desmitifica una vez más lo que él llama el enamoramiento, esa falacia que nos inculcan desde hace siglos a través de libros, canciones y películas, que pretende convertir al amor romántico en el único afán o motivo de la felicidad del individuo, y mucho más en está época que se avecina. Naturalmente, esta óptica, aunque a veces se vislumbre, sólo se llega a confirmar cuando cumplimos cierta edad, y el “joven” Marías pasa ya de los 60, por lo que está perfectamente capacitado para exponerla, y lo hace magistralmente, como siempre, en “Los enamoramientos”.

Otra vez la verdad, otra vez el amor, otra vez profundas reflexiones, pero en un tono diferente al anterior… ¿o no tanto? Os dejo tiempo para que vayáis entrando en materia. Recordad que tenemos tiempo, estaremos con este libro hasta el 16 Enero del próximo año… “largo me lo fiáis…”

18 comentarios:

Carlos de Dios dijo...

Buenas!Me acabo de hacer con el libro,las primeras páginas ya me ha mandado un mensaje de la comunicación no verbal,la costumbre de ir habitualmente algún sitio te hace cómplice con los que habitualmente acuden a un lugar y cómo sin quererlo entras a formar parte de las situaciones cotidianas,si tienes costumbre de ir a tomar un café a un sitio al final eres observado y si faltas, quizás hasta alguien te echa de menos...bueno,pues ya comencé a leerlo...seguiremos en contacto!

Desearos a todos qué vuestros sueños y propósitos se cumplan y sigamos leyendo también unos cuántos libros el próximo año!

felices fiestas!!

Carlos

Teresa Al.Ma. dijo...

¡Hola a todos!

A mí me está costando entrar en la historia. Llevo unas 80 páginas y no me engancha. Creo que se repite mucho, que le da mil vueltas a un concepto (que sí, que le echa mucho de menos, que es increíble lo que ha ocurrido, así de la manera más tonta, que le podía haber sucedido a cualquier otra persona... Venga, ya, ¡a otra cosa!).

La parte que más me ha gustado es un capítulo en el que habla del trabajo en la editorial y me ha dicho un pajarito que es pasajero, que no se vuelve a hablar de ello...

Así que continúo la lectura esperando que pronto haya algo de acción, que suceda alguna cosa que capte mi atención.

¡Feliz año! :)

Carlos de Dios dijo...

Buenas y Feliz Año!!
...Espero que este año nos traiga muchas y buenas lecturas!:-)

Quizás el libro de Márai puso el listón muy alto y a mí tampoco me ha llegado a enganchar tanto... pero bueno, aquí también se pueden sacar conclusiones a pesar de citar muchas veces textos de Balzac ó de los Tres Mosqueteros en medio del libro.

Para debate sería si el tema de los "enamoramientos" ó "encaprichamientos" está inversamente proporcional a cuán difícil ó malvado pueda ser la otra persona que no corresponde en la medida que una de las partes quisiera,ó si se quiere mantener una relación en base a un criterio/juego pre-establecido "sin enamoramientos" por ninguna de las partes implicadas, un juego difícil de llevar a cabo...

Sigamos la lectura...

Saludos!!

Carlos

Anónimo dijo...

!Feliz año¡
Es el segundo libro que leo de Javier Marías, sinceramente no me gusta su narrativa, es excesivamente descriptiva y lenta embarcándose en espirales y abanicos de personajes o situaciones.
La conclusión que saco de la lectura, y creo que así el autor desea expresarlo,que la vida es un conjunto de situaciones que se dan por por el azar,!qué son así¡ pero qué también pueden ser de otra manera, bien en "pensamientos robados", o en realidad cambiante.

Mara.

Carlos de Dios dijo...

Qué curioso! Parece que al menos a nosotros no nos enganchó tanto el libro,para mí ha sido la primera vez que he leído a Javier Marías también.

Como el libro consta de 4partes,400 hojas, pues claro hay partes más amenas que otras...siempre hay algunos textos que se merecen su segunda lectura, hay comentarios irónicos referentes a tópicos "las mujeres solemos percibir en seguida..." , "se ve venir en seguida a los hombres que se tiran en plancha...", irónicos comentarios que me hicieron gracia.

Subyace la idea del Casanova y malvado que engancha y motiva desde un primer momento a una mujer y las distintas formas de enamoramiento de los personajes, siempre se sacan conclusiones de las novelas, me quedo con esta frase:
"Lo que pasó es lo de menos. Es una novela, y lo que ocurre en ellas da lo mismo y se olvida, una vez terminadas. Lo interesante son las posibilidades e ideas que nos inoculan y traen a través de sus casos imaginarios, se nos quedan con mayor nitidez que los sucesos reales y los tenemos más en cuenta"

Carlos

Unknown dijo...

Hola, feliz año a todos.

Para mi también ha sido la primera vez que he leído a Javier Marías. He de decir que a mi me ha enganchado la lectura, cierto que en algunos momentos se hace monotono, pero yo diría que no en lo que piensa y narra María, sino en que sus pensamientos y lo que dicen el resto de personajes de la historia (en las pocas conversaciones que ahí), casi con las mismas palabras, es cuando se hace repetitivo.
En cuanto al tema me ha gustado como refleja el autor como situaciones normales y corrientes llevan a otras que ya no lo son.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Buenos días!

A estas alturas de la lectura (ya lo he terminado... pero no voy a destripar nada, lo prometo), se me ocurren algunas preguntas cuya reflexión quizá nos ayuden a "leer" el libro desde otros puntos de vista:
¿Consideráis que la fuerza narrativa la lleve un mujer, hace la narración diferente? lo pregunto por comentarios que en otros foros he encontrado sobre este tema.
¿Estamos ante una sola novela o ante una "novela de novelas", por la cantidad de referencias literarias que tiene a obras de Shakespeare, Sterne, Dumas y Balzac?
¿Qué es lo que hemos aprendido del amor y/o del enamoramiento? Al menos, ¿habremos aprendido a distinguirlos?
La novela toca claramente otras cuestiones ya repetidas en el libro anterior, no os parece? el honora, el azar, la suerte, la indagación de la verdad en cuestiones cotidianas, el engaño y sus secuelas, las apariencias, lo que se deja de decir, la memoria y la presencia de los muertos y su influjo en las personas que lo sobreviven...
Seguro que se me escapan muchos otros que a vosotros se os han aparecido, ¿os animáis a compartirlos con todos?
Muchas gracias a todos, ah y ya que aún no lo había dicho FELIZ AÑO!!
Felicidad

Rafael dijo...

Buenas tardes a tod@s
Me ha costado hacerme con un ejemplar del libro de Marías; parece que es una lectura muy solicitada, cuestión ésta que me sorprende porque las novelas de este autor no son precisamente “entretenidas” tal y como se entiende popularmente dicho término, lo que no quiere decir que no estén cargadas de enjundia, pero es verdad que piden una mayor implicación del lector, y a esto ya no estamos muy habituados.
La propuesta de lectura me parece muy acertada, sobre todo después de haber leído la novela de Marai. Como viene a decir Felicidad, “Los enamoramientos” trata algunos de los temas de los que también se habla en “El último encuentro” (enamoramiento/amor; la ausencia y la muerte; el engaño), pero creo que con un tratamiento y desarrollo diferentes. ¿Qué pensáis al respecto?
Algo que debemos tener en cuenta es que el autor utiliza de forma habitual la digresión (esto es muy habitual en las novelas de Marías) y somete al lector a continuos cambios de perspectiva a la hora de presentar lo que ocurre con sus protagonistas, y esto puede resultar pesado o aburrido si no queremos aceptar esta propuesta. Pero si decidimos hacerlo, si escuchamos la fuerte resonancia de los actos y las palabras de los personajes (presentes y ausentes), el final de la historia quizá no nos importe tanto.
Bueno, como primer comentario creo que ya es suficiente. No os canso más.
Saludos y que el año recién comenzado sea nuestro, nos pertenezca. Creo que es la única forma de que nos procure una cierta felicidad.

Anónimo dijo...

Buenos días: Yo lo estoy terminando y veo como una situación concreta (una muerte) pasa por tres fases: desde el azar a un asesinato preconcebido por una serie de razones que se van despejando poco a poco en el libro mediante dialogos no demasiado desarrollados intercalados con pensamientos relativos al amor, el azar y a la muerte en si misma y a su influencia en los vivos y su visión a lo largo del tiempo que va pasando por el sufrimiento, el recuerdo y no tanto el olvido como la difuminación. La protagonista se ve envuelta en una situación que se inicia en el azar de conocer de vista en una cafeteria a implicarese de lleno en sus vidas. El argumento y su desarrollo es clásico pero lo que más me ha llamado la antención es la descripción de los pensamientos, de los enamoramientos y lo que tiene de importancia que el azar o situaciones cotidianas tienen el la vida

Carlos de Dios dijo...


Yo no considero que aunque la fuerza narrativa la lleve una mujer, haga la narración diferente sino más descriptiva en sentimientos.

Siempre se aprende algo nuevo, hay diferentes tipos de enamoramientos cómo lo es el de Díaz-Varela de Luisa totalmente distinto de Maria que creo que es más bien un “encaprichamiento”, un enamoramientos insano.

Ciertamente subyace de nuevo el tema del honor y amistad entre Miguel Deverne y Díaz-Varela…y cómo no, una mujer como Luisa, nos deja a nuestra elección creernos ó no el desenlace final, interpretar si las razones de Díaz-Varela son ciertas ó no, y nos convencen para creer que no hubo traición a su amigo del alma (quizás cuando todos terminen el libro se podía debatir este punto).


Por momentos, si que pareciera que estábamos inmersos en varias novelas a la vez,
a mí al menos me ha servido también para tener un acercamiento a la novela del Coronel Chabert de Balzac, así como Sterne o Dumas, sería gracioso observar qué pasaría en la vida real si realmente alguien con el que tuvieras una relación, se le diera por desaparecido ó muerto…probablemente si ya has comenzado otra relación y reapareciera de nuevo esta persona, pues preferirías que las cosas ya siguieran su actual camino y que los desaparecidos (ó muertos en este caso), no fueran obstáculo y mejor no volvieran aparecer.

Teresa Al.Ma. dijo...

Hola a tod@s!
Al fin he terminado la lectura. Justo ahora. Así que aprovecho para comentar a algunas de las cuestiones que habéis lanzado mientras revolotean en mi cabeza los pensamientos todavía frescos.

¿De qué habla Javier Marías en esta novela? ¿De los enamoramientos? Si es así, creo que no la he entendido en absoluto. Más bien creo que habla de otros muchos temas, pero principalmente de lo novelesco de la vida.

El azar, como habéis apuntado, es parte fundamental del hilo. El azar es el que lleva a María a cruzarse con Julia y, más tarde, a verse envuelta con Díaz-Varela.

La condición humana: el asesinato, el sentido de la justicia, el derecho que tenemos o no a entrometernos en el camino de otra persona, en su vida (o su muerte). ¿Qué derecho tengo a reclamar el amor de esta persona? ¿Qué derecho tengo a traerle la verdad, qué gano con ello? ¿Qué gana esa persona? Y sin embargo, ¿cuánto perdemos todos? ¿Qué derecho tengo a devolverle un recuerdo, de darle vida a un muerto que ya nada podrá hacer más que desbaratar la vida de varias personas?

La ficción que se mezcla con la realidad: ¿qué hay de verdad en su relato? ¿Qué es lo que en verdad ocurrió? ¿Su versión?, ¿la mía?, ¿ninguna de las dos?
Sin embargo no creo que la búsqueda de la verdad en sí sea un tema de especial interés para María, la protagonista. De hecho en muchas ocasiones reniega de ella. No quiere indagar, ¿para qué? Cualquiera puede mentirle. Sí es cierto que ella reflexiona mucho (para mí, demasiado xD) y que eso le lleva incluso a imaginar conversaciones y situaciones que no sabemos si existieron en verdad.

Sobre el amor y los enamoramientos, o el capricho momentáneo por una persona, no me queda claro. Si he entendido bien, Díaz-Varela habla del enamoramiento por encima del amor: "[...] la fuerza de la costumbre es inmensa y acaba por suplir casi todo, incluso por suplantarlo. Puede suplantar el amor, por ejemplo; pero no el enamoramiento, conviene distinguir entre los dos, aunque se confundan no son lo mismo...", dice. Es algo que te vincula con la persona amada. Es una necesidad imperiosa, una debilidad sentida por alguien.
Es un enfoque diferente y desde luego llama la atención. Pero personalmente no me gusta su manera de utilizarlo como justificación universal que está por encima de todo, porque desprestigia muchos otros factores humanos que intervienen en el amor (o enamoramiento) entre dos personas y en los cimientos de la personalidad del individuo. Por ejemplo, no respeta lo sentimientos del resto de las personas, empezando por Julia (tiene la seguridad de que acabará cediendo, y en la novela es así, su plan tiene éxito, pero en la vida real... ay amigo), siguiendo por María, a la que "humilla" diciendo que su sentimiento hacia él es inferior que el suyo hacia Julia (¿qué sabe él?), terminando por el pobre Desvern (que nada parece importar, es un obstáculo que uno liquida y otros olvidan). Y en nombre de ese enamoramiento todo vale.

La justicia, la dignidad, la amistad... nada parecen valer en esta historia. Son puntos sobre los que se habla para concluir que de nada sirven y a nadie le importa.

Teresa Al.Ma. dijo...

Por último, mi pequeña opinión sobre la novela en sí.

Como dije, me ha costado horrores. Rafael decía acertadamente que Marías utiliza mucho la digresión. Demasiado, para mi gusto, y a veces sin ningún sentido. La mitad del texto son conjeturas de María sobre lo que sucedió, lo que se habló, lo que podría haber sido... Una pequeña parte, no menos importante, consta de detalles sin ninguna importancia (todavía me río pensando en su dilema antes de darse a conocer ante Ruibérriz "sostén o no sostén, esa es la cuestión") que no estarían mal (para crear misterio, para hacernos esperar al desenlace, para dar contexto y densidad a la historia) si no fuera porque se recrea demasiado en ellos. Hasta términos insoportables para mí. En innumerables ocasiones he pensado "en serio, con una vez que digas algo lo pillamos, no somos tontos, no hace falta repetir el mismo concepto de 5 maneras distintas. ¡Basta ya!".
Hace tanto alarde de vocabulario, de gramática, de sus conocimientos idiomáticos, sobre literatura, pero sobre todo de un profundo conocimiento de cómo es el mundo y cómo son las personas (¡ja!) que mi conclusión final es que, oye, quizá si que habla de "Los enamoramientos", más concretamente del enamoramiento que Javier Marías siente por Javier Marías. Espero que no haya ningún fan acérrimo del escritor que pueda sentirse dolido. Si es así, ¡lo siento! pero es lo que pienso sobre la novela :/

Carlos de Dios dijo...

Después de leer los comentarios de Teresa:-)...parece generalizada la idea de que a algunos no nos ha enganchado el primer libro de Javier Marías.

Queda la pregunta que muchas veces se hace...¿en el Amor como en la Guerra todo vale??

... y os creéis la versión de Díaz-Varela??...personalmente no, para nada!

Tampoco todo lo veo yo tan negativo, pero si que hubo días que no avanzaba en la lectura de 400 páginas...

Hasta la próxima lectura!!

Rafael dijo...

Buenas tardes a todos.
Poco que añadir a la interesante disección que Teresa hace de la novela; menos mal que no te ha gustado ;)
Coincido con ella en que su tema principal no es el del amor, que nada tiene que ver con el enamoramiento según mi opinión, pero este es otro cantar.
No es la novela que más me gusta de Marías, autor que sí me interesa pero del que, leído lo leído, no me atrevo a recomendar otras novelas ;)
Un saludo a todos y ¿vamos a por otra?

Teresa Al.Ma. dijo...

¿Tenéis miedo de que una novela propuesta me encante y entonces haga comentarios de 100 páginas? xDDD Tranquilos. Y perdonad, es que cuando me tomo en serio y me entusiasma una cosa no tengo medida, y me tomo en serio el club y las preguntas que lanzáis, me entusiasma la lectura y además en este caso lo tenía recientito. Vamos, que se alinean los planetas.

Trataré de ser más comedida en cuanto extensión para las siguientes ocasiones.
También porque siento que digo tantas cosas que os bloqueo y se trata de que todos participemos.

¡A por otra lectura!

P.D. No me creí nada de nada la versión de Díaz-Varela.
P.D.2 Creo que Javier Marías escribe muy bien (muy pero que muy bien) pero no me gusta como narra. Y no veía diferencias entre sus personajes. ¡Era como estar escuchando siempre al autor!

Felicidad dijo...

Hola a todas y todos!!

Qué me encantan vuestros "abrumadores" comentarios... y eso que parece que la novela no os ha gustado.
Marías es Marías, es así, es como el escorpión, es su condición... un tipo sabio, que se sabe sabio, que le gusta leerle y escucharse, que sabe de escribir, que tiene mucho vocabulario, que sabe mucho de literatura, y que, nos guste o no, coincidamos con él o no, tiene un gran conocimiento de la condición humana, no os parece?
Personalmente me han gustado las reflexiones, sobre el amor, la verdad, la justificación a las mentiras que cada uno damos en nuestra vida, quizá es nuestra propia mentira para poder seguir viviendo...o en el peor de los casos sobreviviendo...
Particularmente, como vosotros, tampoco me creí la explicación de Díaz Varela, como tampoco creo en lo que una muy buena amiga mía, define como "justicia poética", en la que todo encaja, es cuando dices, "venga ya... hombre, que unos no pueden salirle siempre con la suya y otros, por contra, no pueden perder siempre...".
Por otra parte, creo que define muy bien las dos velocidades (por lo menos dos...), de los enamorados... la de ella, María, que está profundamente enamorada de Díaz Varela, él para quién María es solo un capricho, un juego, un entretenimiento, mientras prepara el terreno para llegar a Julia, por la que él siente lo que María siente por él... qué lío, el juego del amor... del enamoramiento, del encaprichamiento...
En fín, que la novela seguramente daría para mucho más, pero de momento esta, la dejamos aquí y vamos a por la siguiente.
Entre hoy y mañana, cuelgo la información de nuestro siguiente libro.
Como siempre, os agradezco vuestros "jugosos" comentarios, a mi no me parecen en absoluto que sean ni aburmadores, ni largos, ni atropelladores, ni nada de nada. Bien al contrario, os pediría, que alcanzado este nivel, no nos queda otra que manterlo... ¿no os parece?
De nuevo gracias y seguimos!!!
Felicidad

Anónimo dijo...

Muchas gracias Carlos!

Efectivamente he rebautizado a Julia como Luisa... en fin, estas cosas que pasan... y eso que Julia es mi nombre favorito.

Muchas gracias como siempre por las apreciaciones y comentarios!!

Seguimos?

Felicidad

Carlos de Dios dijo...

De nada!! De hecho creo que fue un lapsus también de Teresa en un post anterior...pero es que Luisa apenas tuvo parte principal en la novela:-)

Gracias a ti por proponernos las lecturas y seguimos!!